Una jornada de debat i inspiració per a totes aquelles persones que tenim quelcom a dir en relació a un nou model social, econòmic i cultural. Un espai de confluència de persones i col·lectius on intercanviarem experiències i projectes que busquen donar respostes propositives i no violentes en el moment actual de crisi.
Alguns dels col.lectius participants: Plataforma d’Afectats per la Hipoteca (PAH); Cooperativa Integral Catalana (CIC); Iaioflautes; Marees; Renda bàsica; SICOM; Cafè amb llet; Fotomovimiento; La Directa; Marea de pensionistes; Plataforma No al TTIP; Rights of Nature Europe…
Organitza: PRESSENZA - Agència Internacional de notícies Des del 2009 és present a 20 països arreu del món i te més de 200 col·laboradors internacionals. Integrada per voluntaris, independent i sense ànim de lucre, l´agència treballa per donar visibilitat a notícies, iniciatives i propostes lligades a la pau, la no violencia, el desarmament, els drets humans i la lluita contra qualsevol forma de discriminació.
Hijo de ferroviario, ha vivido en muchos lugares
de España. Conoce las diversas realidades del territorio. Cooperativista
de joven y activista como Iaioflauta.
Entrevista a Luis Sotillo del Colectivo IAIOFLAUTAS Por Esperanza Fernández
¿Cómo nació el colectivo de Iaioflautas?
El nacimiento de los Iaioflautas fue algo casual, no premeditado ni pensado previamente por nadie en especial.
El 15 de mayo del 2011, se encontraron en la Plaza Cataluña, en el
contexto del 15M unos 15 ó 16 activistas de los años 1970 de diferentes
procedencias: sindicalistas, antiguos militantes del PSC o del PSUC, que
compartían una cierta “indignación” desde hacía tiempo, y que repetían
aquella frase típica de “a ver si nos vemos”… resultó que al final se
vieron.
Yo no estaba en ese grupo inicial, me sumé más tarde. Y a partir de ese
momento comenzamos a debatir sobre qué podíamos hacer para apoyar el 15
M, apoyar a nuestros hij@s y niet@s.
Acordamos inicialmente buscar nuestra identificación.
En cuanto al nombre nos ayudó muchísimo la Sra. Esperanza Aguirre, ya
que dijo sobre los del 15 M que estaban en las Plazas, que eran unos
“perroflautas”. Y como nosotros no nos consideramos perros, pero sí
abuelos (iaio en catalán), entonces decidimos llamarnos “Iaioflautas”.
Nos faltaba una indumentaria. Se optó por el chaleco amarillo de gran
vistosidad.
¿Nos puedes comentar algunas acciones significativas de los Iaioflautas?
Comenzamos por la ocupación de algunas sedes bancarias, como la del
Santander o también ocupando algún autobús por las subidas abusivas del
precio del transporte. También apoyando a colectivos cómo Democracia
Real Ya, la PAH, Auditoria de la Deuda, 15MpaRato, Mareas de Sanidad o
Educación.
En octubre y noviembre del 2011 realizamos varias asambleas con el fin
de atraer a gente revolucionaria, díscola y disconforme, pero sobre todo
agrupándonos bajo el calificativo de “indignados”. Nuestra idea era:
“si no protestas no te ven”, y aunque sigan pisándote, hay que gritar
para mostrar que no lo aceptas.
Cada mes hacíamos una “travesura” como si de mozalbetes se tratara. Algunas muy sonadas.
La ocupación de los Departamentos de Interior o Sanidad de la Generalitat, el Fomento del Trabajo, el INSS.
La ocupación de la Bolsa fue magnífica. Interrumpimos una sesión del
Parlamento de Cataluña… En fin, han sido tantas que no puedo recordar
todas.
Queríamos demostrar que estábamos indignados por lo que sucedía y abrir los ojos a los que aún no lo veían.
Además de estos actos se fue haciendo un trabajo de expansión creando
réplicas, inicialmente en poblaciones próximas a Barcelona, llegando a
ciudades tan alejadas como Madrid, Valencia, Córdoba, Castellón,
Murcia….
También se ha hecho mucho trabajo de divulgación a través charlas,
presencia en televisiones. Se nos han grabado asambleas, se editó un
cómic (y ahora un libro), incluso hemos sido solicitados por las
direcciones de colegios, institutos o universidades para explicar
nuestro movimiento social.
Dejaron de ser unas “locuras de viejos” para convertirse en un
movimiento social por todos conocido e identificado como consecuencia
del 15M.
Pero a mí las acciones que más me han gustado fueron las visitas que en 2
ó 3 ocasiones realicé con algún compañero a centros de educación
primaria y secundaria, niños de entre 10 a 15ó 16 años.
Recuerdo con
especial afecto el caso de “Matías” un niño de 14 años de Segur de
Calafell.
Recuerdo que prestaba una especial atención a las explicaciones de
nuestras reivindicaciones. Luego supe por una de sus maestras, que él y
su familia habían sufrido un desahucio, hecho que le dejó marcado.
Me preguntó: “¿Dónde puedo conseguir un chaleco amarillo de Iaioflauta?”. No pude resistirme y le regalé uno, y además dedicado.
Estos días que se está celebrando el 5º aniversario del 15 M, ¿Qué le transmitirías a los jóvenes?
Tantas cosas, que no sé por donde empezar. Una, que se levanten y hagan suyo el 15M
La mayoría de jóvenes, en este momento, no se pueden ir de casa de sus
padres hasta los 30 años, aunque estén muy preparados. Hay muchos
jóvenes con “masters”, haciendo de mozos de almacén.
Hoy muchos jóvenes no pueden casarse hasta los 30 y pico de años. Luego
tienen hijos y han que dejarlos en las guarderías. Sería bueno que los
jóvenes pudieran cuidar de sus hijos.
Les diría que “si no te gusta esta película… pues vete a otro cine”.
Atrévete a ir a Kenia o a Botsuana. El mundo no tiene fronteras, se las
ponen los hombres.
Que si vivieras sin apegos a convencionalismos sociales como la familia,
la religión, el consumo o el territorio, sabrías lo que es la libertad
total. El amor lo encontrarás en cualquier sitio, la libertad, no.
Es el momento del partido de las personas. Pasa de actuar para ti,
pensando en ti, individualizando tu vida y actúa, vive para los demás.
¡Verás que cambio mental se te produce!
Que estés presente en todas las movilizaciones. ¡Vive, no te sientes!
Lo tienen difícil, pero han de ir adelante. Tal vez no hemos sabido
transmitirles, desde los padres, hasta los educadores, pasando por los
medios de comunicación; unos valores, que actualmente son invisibles en
la sociedad y por eso algunos, no todos, están “amorfos”.
Ahora nacen más inteligentes. Tienen otros mecanismos de aprendizaje y
comunicación. Que se puede ser feliz fuera del consumo y que si son
capaces de unirse en la indignación, la riqueza material podrá ser mejor
distribuida.
También les diría: aprende idiomas y vete a cualquier parte del mundo que te guste.
Ya que ahora no se hace la “mili”, yo creo que los jóvenes deberían
pasar por una especie de “servicio social”, donde dediquen un año de su
vida a hacer algo desinteresado por los demás y convivieran con los
diferentes.
Siempre me he imaginado un ejército de carpinteros, músicos, maestros,
cocineros o lampistas; preparados para asistir a personas en casos de
catástrofe (terremotos u otras situaciones que requirieran de ayuda) o
simplemente para culturizar. Pero ¡Ojo!, sin colonizar. Lo que llamaría
un “ejercito civil”.
El pasado viernes 9 de
mayo se presentó en una sala de cines de Barcelona el documental de
activismo social “Atajos”. El corto muestra una serie de proyectos de
transformación social pertenecientes a la red de la Cooperativa Integral
Catalana, la CIC, creada en el 2010.
La CIC es una cooperativa de
producción, consumo, vivienda, salud y educación que agrupa a diferentes
colectivos conectados en red, organizados con un modelo asambleario
horizontal y que realizan parte de sus transacciones en moneda social.
Proponen una alternativa no capitalista al sistema, generada desde la
base, partiendo de la autogestión, la autoorganización y la democracia
directa.
La CIC cuenta con una central de abastecimiento, la cual agrupa los
pedidos de cada grupo local de la red y los satisface con artículos de
los colectivos de la red u otros productores y artesanos. Principalmente
distribuye producción agroecológica y artesanal local. Utilizan moneda
social conjuntamente con la moneda oficial.
Entre los colectivos presentados esta “Calafou”. Un espacio de
actividad productiva, tecnológica y habitacional, ubicado en una antigua
colonia industrial, a unos 50Km de Barcelona, que se define como
colonia ecoindustrial postcapitalista. El proyecto, que se inició en el
2011, consiste en la recuperación de los edificios y las viviendas existentes y la puesta en marcha por el grupo de actividades
económicas, infraestructuras colectivas, talleres y viviendas.
Otro de los colectivos mostrados es “SOM comunitat”. Un proyecto de
trabajo y convivencia de una comunidad que desarrolla proyectos de
alimentación agroecológica así como talleres de salud, terapias,
ecología o espiritualidad. Situados en una histórica casa de labranza de
un antiguo núcleo rural, proponen una manera sostenible y humana de relacionarse e interactuar con su entorno.
Como proyecto urbano esta el centro “Áurea social”. Un espacio en el
centro de Barcelona en el cual se desarrollan proyectos de salud,
educación, talleres, conferencias, comedor agroecológico, huertos
urbanos, asesoramiento habitacional, etc.
En el campo de la salud, el “Sistema de salud cooperativista”
desarrolla un modelo de salud integral, basado en la autogestión de la
salud, al margen del modelo oficial.
En el campo educacional se presenta el colectivo “Albada”, una
asociación familiar y cultural para una educación viva y respetuosa.
Situado en el medio rural, formado por un grupo de educadores que optan
por un proyecto pedagógico alternativo, en el cual las personas reciben
acompañamiento para encontrar sus propias herramientas y recursos.
El documental también hace un breve homenaje a Enric Duran como
iniciador del proyecto, con una estafa bancaria a modo de denuncia del
sistema financiero y la forma de generar dinero. Con dicha acción, se
obtuvo un capital que permitió imprimir los diarios “Crisis” y “Podemos!
(vivir sin capitalismo)”, medios de denuncia e información, así como financiar algunas de las actividades.
Estas acciones se iniciaron a finales del 2008, algunas son
contemporáneas a la aparición del movimiento del 15M en el territorio
español, en mayo del 2011. En el documental aparecen también imágenes de
las asambleas y la ocupación de las plazas por el 15M.
La sala con un aforo de 300 personas
estaba repleta y tras la proyección muchos de los participantes, algunos
de ellos protagonistas del documental, mostraron un clima de alegría y
entusiasmo por la labor desarrollada durante estos años y las
posibilidades futuras del proyecto.
Atajos es un documental realizado por Inlakesh, dos mujeres que
vienen del mundo del cine documental (Glòria Matamala y Irene Colell),
mediante una campaña de crowdfunding. Los próximos pasen serán el 22 y
29 de mayo.
Desde la crisis del 2008 España vive una grave situación de
emergencia habitacional; numerosas familias han sufrido el desalojo de
su vivienda y el reclamo de la deuda al no poder pagar sus hipotecas ni
sus alquileres. En respuesta a esta difícil problemática, en febrero de
2009, nació la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) en
Barcelona. En este momento existen más de 200 PAH en todo el territorio
español. Se trata de un movimiento social que lucha por el derecho a una
vivienda digna, se consideran un movimiento horizontal, no violento,
asambleario y apartidista.
Hemos realizado una entrevista a una de las
plataformas más activas; la PAHC del Bages, que nos ha invitado a
participar en su asamblea y nos ha explicado su trabajo y su
funcionamiento.
Entrevista a miembros de la PAHC. (Foto Javier Belda)
Pilar – ¿Podéis explicarnos que es la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) y cuál es su objetivo?
Mari – Es un colectivo de gente muy diversa, de muchas nacionalidades
que lucha por el derecho a la vivienda. En un inicio trabajó la
problemática de las familias afectadas por el impago de una hipoteca,
personas que a raíz de la crisis del 2008 no pudieron seguir pagando su
hipoteca y se encontraron en la situación de perder su casa y a la vez
seguir debiendo una gran cantidad de dinero al banco. (En España la ley
hipotecaria permite a las entidades financieras en el caso de desahucio a
que si el actual valor de la vivienda no cubre la totalidad de la deuda
contraída el desahuciado sigue teniendo una deuda con el banco). En
el 2009 se creó la PAH para dar una respuesta a estas familias.
Desde
entonces la plataforma ha hecho muchas acciones de protesta y denuncia
de la situación, muchas negociaciones con bancos, nos hemos sentado
muchas veces con diferentes entidades financieras para intentar que las
familias se quedaran sin esa deuda, es decir, conseguir que la
devolución de la vivienda sirviese para liquidar la deuda. También había
que resolver encontrar una vivienda a esa familia que se quedaba
directamente en la calle. Para dar una solución a estas familias nació
la obra social de la PAH. (La PAH, a través de su Obra Social, lleva a
cabo realojos de familias sin vivienda, en edificios vacíos propiedad de
entidades financieras). En Catalunya existen alrededor de 80
plataformas y unas 200 en toda España. Concretamente nuestra plataforma
se llama Plataforma de Afectados por la Hipoteca y el Capitalismo (PAHC)
y trabaja en la comarca del Bages.
Ricki – La PAHC del Bages nació en el 2012, en la asamblea participan
unas 150 personas, fue creada por gente que ya participaba en otros
movimientos sociales que vieron como la problemática de la vivienda se
estaba endureciendo en la comarca. Manresa, que es la capital de la
comarca del Bages, es una ciudad de unos 75.000 habitantes y ha sido
salvajemente afectada por la crisis y además tiene una enorme cantidad
de pisos vacíos. Del total del parque de viviendas, unas 40.000, más de
9.000 están desocupadas, un 22%, de esas viviendas desocupadas, más de
1.000 son propiedad de los grandes bancos y de esas unas 900 están
cerradas desde hace más de dos años y no se ofrecen al mercado de
alquiler porque los bancos las mantienen para especular. Ahora bien,
según la ley, estás viviendas debería ser ofrecidas al mercado de
alquiler social o bien pagar un impuesto por estar desocupadas, sin
embargo siguen vacías y con el agravante de que estamos hablando de un
país en el que se ha hecho el rescate bancario con dinero público más
grande que se ha realizado nunca en Europa Occidental. Un rescate que ha
llevado a las clases populares de este país a la ruina. A estos bancos
rescatados con dinero público se les permite tener un stock de viviendas
vacías cuando hay muchas familias sin casa que necesitan esas
viviendas.
Rufí – Existen leyes para que esas viviendas se ocupen y cumplan con su
función social. La ley para el derecho a la vivienda, ley catalana
aprobada en el 2007, permitía que las administraciones locales multasen a
los propietarios que tenían pisos vacíos, esta competencia ha sido
desarrollada por algunos ayuntamientos, pero no se ha aplicado de forma
generalizada hasta febrero de 2016, momento en que el gobierno
autonómico, presionado por la PAH aprobó un reglamento que obliga a los
grandes tenedores de vivienda a declarar las viviendas desocupadas por
más de dos años para aplicarles un impuesto, con el interés de poner esa
vivienda en circulación en el mercado.
El ayuntamiento de Manresa, ya en el 2014, gracias a la presión de la
plataforma aprobó una moción para multar a los bancos, pero a día de hoy
todavía no se ha hecho efectiva ninguna multa.
En julio del 2015 el Parlamento de Catalunya aprobó otra ley, la ley
contra los desahucios y la pobreza energética que había promovido la PAH
mediante una iniciativa legislativa popular. La finalidad de esta ley
es proteger a las familias que no pueden pagar la hipoteca y se quedan
sin vivienda. En el caso de que la vivienda sea propiedad de un banco,
obliga al banco a que antes de desalojar a esa familia le ofrezca la
vivienda en alquiler social. Si la vivienda no es propiedad de un banco
si no de un particular la responsabilidad de ofrecer una vivienda en
alquiler social queda traspasa a la administración concretamente al
ayuntamiento del municipio.
Estas medidas permitirían frenar los desalojos pero en realidad los
bancos están actuando ilegalmente y en muchos casos ejecutan un desalojo
sin ofrecer una alternativa de vivienda social. Como la medida es solo
para las familias que tienen una hipoteca, en el caos de las familias
que se quedan sin vivienda porque no pueden pagar el alquiler no tienen
ninguna alternativa de vivienda social. Como en otros campos, el derecho
a la vivienda se ha dejado en manos de la regulación del mercado. La
lucha de la plataforma en este momento es conseguir que esos
instrumentos legales que se han aprobado se apliquen.
Ricki – En otros países de la Europa comunitaria disponen de una
medida del 18% de viviendas de alquiler social mientras que España no
llega al 1%, este dato refleja cuales han sido las prioridades de los
gobiernos que han gobernado los últimos decenios este país.
Mari – En general las políticas relacionadas con el acceso a la
vivienda han estado olvidadas y no se ha actuado sobre el precio del
alquiler de la vivienda, excesivamente alto, ni se ha realizado ningún
tipo de regulación sobre la vivienda.
Ricki – Por ejemplo en el año 1996 hubo una de desregularización del
suelo que afectó al precio del suelo y al precio de la vivienda (en
algunos lugares el precio del suelo ha llegado a aumentar hasta un
200%).
Rufí – En los años anteriores a la crisis del 2008 no había en el
mercado viviendas de alquiler accesible, tampoco viviendas de protección
oficial de alquiler y para muchas familias la solución pasaba por
comprar una vivienda y firmar una hipoteca ya que les suponía el mismo
gasto que una vivienda de alquiler y les resultaba más sencillo. Los
bancos daban todas las facilidades para firmar una hipoteca, en muchos
casos con cláusulas trampa y mecanismos opacos que no entendía el
comprador y que después se han revelado ilegales. Esta fue una trampa
para muchísimas familias que con la llegada de la crisis no pudieron
seguir pagando sus hipotecas. En el momento en que sobreviene la crisis
se derrumbaba ese montaje, pero los bancos siguen totalmente protegidos y
si no consiguen cobrar las hipotecas se quedan con las viviendas. Y las
familias con una gran deuda a sus espaldas.
Ricki – Aunque el derecho a la vivienda está reconocido en la
constitución, en el estatuto y en numerosas legislaciones, no existe un
derecho real ya que no es reclamable jurídicamente como si es reclamable
el derecho a la propiedad privada.
Pilar – Mari ¿podrías explicarnos tu caso concreto? ¿Qué problemas has tenido con el tema de la vivienda?
Mari – En mi caso, mi familia vivíamos en un piso de alquiler hasta
que nos dimos cuenta que nos resultaba más económico comprar un piso y
firmar una hipoteca que seguir pagando el alquiler. El banco nos dio el
110% de la hipoteca, es decir más del valor de la vivienda, pero cuando
tuvimos problemas familiares y económicos que nos impidieron seguir
pagando la hipoteca nos quedamos sin casa y gracias a la PAHC pudimos
encontrar una solución a la situación.
Pilar – ¿Cuáles son las acciones más importantes que habéis desarrollado con la plataforma?
Mari – Algunas de las acciones que hemos realizado han sido ocupar
todo un día un banco y dormir allí. En este momento la plataforma tiene
cinco edificios ocupados propiedad de entidades bancarias donde se han
realojado a más de 40 familias sin vivienda.
Ricki – La obra social de la PAHC se ocupa de localizar edificios
enteros de obra nueva sin estrenar propiedad de bancos y ocuparlos para
realojar a familias, con el compromiso de que los edificios pasarán
posteriormente al ayuntamiento. Estas acciones están acompañadas con
comunicados a la prensa movilizaciones y con la legitimidad que nos da
el haber probado todas las opciones sin ninguna respuesta.
Las primeras acciones de la PAHC fueron la ocupación de entidades
bancarias hasta que se conseguía una mesa en la que negociar y presentar
mociones al ayuntamiento que no tenían ninguna consecuencia, ante esta
falta de resultados apostamos por la obra social de la PAHC, que
consistía en recuperar esos edificios que son de bancos y han estado
rescatados con dinero público.
Asamblea de la PAHC. (Foto Javier Belda)
Javi – Al atender el problema de manera directa ¿no se ha
desproporcionado el interés de gente que quería obtener una vivienda sin
comprometerse con la plataforma?
Rufí – Las acciones de la PAHC son acciones colectivas que exigen
trabajar al límite de la legalidad, aunque nos sentimos totalmente
legitimados, se trata de acciones difíciles y la gente no puede ir a las
asambleas de la PAHC a poner la mano sin ofrecer nada a cambio, la PAHC
no es ninguna gestoría ni soluciona casos individuales, los
participantes han de comprometerse en las soluciones colectivas.
La plataforma ha conseguido liberar a esas familias de una deuda de
unos 9.000.000€ por la vía de la dación en pago o de la condonación de
la deuda cuando el banco ya ha recuperado la vivienda. Para muchas
personas esta es una importante liberación que les permite pensar en el
futuro y en el futuro de sus hijos. Nuestra lucha no se acaba aquí,
también desarrollamos un tercer frente, que es el de presionar a la
administración local y autonómica para que se redacte un plan de
vivienda que sea eminentemente social.
Javi – ¿habéis recibido presiones por parte de la banca o los poderes?
Rufí – Las presiones que recibimos suelen ser las actuaciones de la
policía, las denuncias y las intimidaciones de los juicios a los que han
de presentarse las personas. En este país en lugar de perseguir a los
delincuentes, persiguen a las personas que sin otra posibilidad van a
vivir a un piso que el banco mantiene injustamente vació.
Esther – ¿Cuál es la relación entre las diferentes plataformas de la PAH u otras agrupaciones?
Mari – Las 82 PAH del ámbito catalán se reúnen una vez al mes, sus
decisiones son asamblearias y cada 3 meses se reúnen con todas las PAH
de todo el estado que son 200.
Ricki – A nivel europeo se han dado muchas charlas en países como
Italia, Alemania, Gran Bretaña, Venezuela…, explicando cómo se ha
llevado a cabo este proceso. Se trata de un proceso de empoderamiento,
que a través del conocimiento colectivo habilita a las personas a
cambiar situaciones que habían desestabilizado su vida.
Rufí- Tenemos una vinculación muy estrecha con la Alianza contra la
pobreza energética. Muchas personas que vienen a nuestras asambleas
tienen problemas de suministros de agua o luz y por tanto el trabajo que
hace la Alianza, de informar a todos los niveles, explicando cómo se
pueden conseguir los suministros sin tener dinero, es muy importante.
Esther – ¿Qué actitud mantiene el ayuntamiento?
Rufí – La fuerza que ha llegado a tener la plataforma nos convierte
en el movimiento social más luchador y eso da un cierto respeto a los
políticos. Hay algunos datos ilustrativos como por ejemplo, en las
últimas elecciones locales la PAHC convocó a todos los partidos para
presentarles su programa de vivienda, la consecuencia fue que el primer
pleno municipal se dedicó a tratar fundamentalmente los puntos que la
PAHC había planteado, aunque en ayuntamiento alarga los procesos de
forma que no ofrece soluciones reales. Así que es una lucha que se ha de
seguir manteniendo, ya que solo con acciones contundentes se consiguen
resultados.
Ricki – Todo esto que ahora es la PAH no hubiese sido posible sin
beber de las fuentes de otros movimientos sociales como asambleas ocupas
de los años 90 o barrios de recuperados en Holanda, Alemania e Italia.
Gestionar 140 personas que viven ahora, de manera precaria en los
bloques ocupados, es un nido de conflictos y dificultades, así que hemos
tenido que aprender a resolver estos conflictos, hemos llorado, nos
hemos reído, nos hemos abrazado y esto nos ha hecho crecer como personas
y como colectivo.
Javi – ¿Qué podrías explicar a nivel humano?
Ricki – Tengo 38 años, he estado en muchos movimientos sociales y la
experiencia en la PAH ha sido una escuela a nivel de “post doctorado”.
El aprendizaje ha sido enorme, tanto a nivel humano, como político, como
a nivel personal y es algo que nos ha hecho crecer y mejorar en muchos
aspectos tanto personal como colectivo. En la asamblea te relacionas con
gente muy heterogénea, son 120 personas de procedencias diversas, de
diferentes ideas políticas culturas y religiosas, al final destacas que
es más lo que nos une que lo que nos diferencia.
Rufí – Algunas de las personas que se han sumado al colectivo en
situaciones muy precarias han acabado siendo líderes del movimiento y se
establecen relaciones que van más allá que la defensa egoísta de los
intereses personales. La gente que participa en la PAH recupera la
esperanza y tienen expectativas de mejorar su futuro, eso se siente y se
vive y se ejemplifica en el lema de la PAH: “si se puede”. También se
realizan actos sociales y culturales, con talleres, comidas,
representaciones teatrales, que ayudan a dar cohesión al colectivo y lo
convierten en una impresionante escuela de vida.
Esther – ¿La plataforma tiene un soporte de gente además de los participantes en la asamblea?
Rufí – Cuando hacemos acciones hay un grupo de personas que
habitualmente están con nosotros apoyándonos, aunque en estos momentos
la mayor parte de la gente que apoya son afectados , no fue así al
inicio en que había una proporción mayor de personas no afectadas, pero
ahora los afectados son el motor de la plataforma. Se vela porque los
afectados puedan superar las timideces, los miedos, las inseguridades y
se conviertan en militantes y asuman ese proceso de empoderamiento.
Ricki – Tenemos la suerte de que la PAHC se reúne en el Ateneo la
Sèquia, que era un edificio vacío que se ocupó hace cinco años por
diferentes movimientos sociales como feministas, movimientos por la
salud y la alimentación etc. A la hora de hacer una acción que requiere
cierto apoyo se generan unas sinergias entre todos estos colectivos.
Javi – Una pregunta sobre perspectivas de futuro. ¿Conocéis
el movimiento DIEM25? Es un movimiento promovido por Varoufakis, que
surge con el ánimo de democratizar y reinventar Europa para el 2025. Lo
comento porque como ya sabemos cualquier cambio esta intrincado con el
poder macroeconómico, los gobiernos no son libres para tomar sus
decisiones, entonces parece como si hubiese que inventar algo también a
escala europea.
Ricki – He estado en Grecia hace 4 meses, fui a parar al barrio de
Exarcheia, que es la cuna de la mayoría de movimientos sociales que se
estructuran en Grecia. Tuve la suerte de poder hablar con gente de
diferentes movimientos y aunque los movimientos griegos son escépticos,
las acciones de Varoufakis han sido como un golpe encima de la mesa, un
acto que no se había dado hasta ahora.
Rufí – Nuestro movimiento en esta comarca se llama Plataforma de
afectados por la hipoteca y el capitalismo (PAHC). Nuestro debate y
nuestra lucha va contra el corazón del sistema y es algo que debatimos
constantemente en nuestras asambleas, el corazón del sistema en estos
momentos es el capitalismo financiero y todos sus tentáculos, por tanto
nuestra lucha tiene esa dimensión clara y cualquier tipo de respuesta
organizada que debilite esos poderes es buena para las personas que
estamos resistiendo contra esa falta de derechos. Pero ya hemos vivido
la experiencia en la PAH de como la fundación de movimientos, como
Barcelona en Comú, han significado una descapitalización de militancia
de los movimientos sociales, entonces, aun viendo con buenos ojos este
traslado de reivindicaciones de los movimientos sociales a las
instituciones, algunos estamos convencidos de que los movimientos
sociales siguen siendo imprescindibles.
Si se debilitan tanto los movimientos sociales y se ponen todos los
huevos en la lucha institucional, al final el sistema acaba
devorándolos. La transición española fue un ejemplo de este proceso,
algunos luchamos contra la dictadura, vivimos la transición, creímos que
aquello iba a ser posible y aquí estamos. Por tanto somos escépticos
ante la confianza de que la respuesta sea institucional, entre otras
cosas porque el sistema seguirá siendo injusto, seguirá dejando personas
en la cuneta y esas personas seguirán necesitando defenderse
políticamente contra un sistema injusto, por tanto no podemos permitir
que se ocupen de los empobrecidos solamente las entidades de
beneficencia y del tercer sector, que aunque hacen muy buen trabajo,
creemos que es más adecuado acompañar que exclusivamente dar.
Por tanto, vamos a seguir siendo necesarios en temas como la vivienda
o en la atención de otro tipo de necesidades fundamentales de las
personas y va a seguir siendo necesario que esos movimientos sociales
tengan un componente político y personas que estén allí dedicadas, con
esa convicción militante.
Esther – ¿Pensáis que las instituciones, aunque tengan buena voluntad, tampoco tienen mucho margen para cambiar las cosas?
Rufí – Aquí yo puedo responder a título personal. Cada uno explica la
feria según le va y yo viví una etapa de mi vida en la que puse todos
los huevos en el trabajo profesional dentro de la institución, al máximo
nivel posible que podía un funcionario. Y viendo cómo funcionaba por
dentro el mejor gobierno de izquierdas de aquel entonces posible, el
Tripartito en Cataluña, llegué a conocer los mecanismos de presión de
los poderes económicos sobre las estructuras políticas. Le vi las
entrañas al lobo. Vi cómo funcionaba aquella maquinaria perversa y cómo
acabamos interiorizando aquello de “la política es el arte de lo
posible” y por tanto en aquellas circunstancias acabas admitiendo cosas
que ahora te las miras con una cierta perspectiva y dices ¡qué
barbaridad! Cuando lo ves desde esa perspectiva, ¿Cómo un gobierno,
teóricamente de izquierdas, el mejor gobierno de izquierdas que entonces
podía haber, permitió cosas como las que se llegaron a permitir, o
realizó cosas como las que se llegaron a hacer?
Entonces cuando eso lo
has visto muy desde dentro y muy desde cerca de los mecanismos de poder,
entiendes cómo la máquina es algo que está por encima de las voluntades
de las personas que deciden meterse en las instituciones y acaban
arrastrando esas voluntades a un sistema que lo devora, devora las
expectativas utópicas que alguien pone en esos movimientos. Y no quiero
ser escéptico, solamente explico mi propia historia personal.
Por tanto, como que la vida es corta, hemos vuelto al redil de la
base, donde están las personas más necesitadas y donde sigue siendo
necesario atender a las personas y promover un cambio político radical.
Ricki – La pregunta sería ¿tiene que mantenerse algo, o se tiene que
cortar con todo? Es normal este tipo de preguntas, yo lo veo normal que
las hagas, porque jugamos en campo contrario. Jugamos en un lugar en el
que tenemos el capitalismo en lo más profundo del ADN de todos y cada
uno de nosotros. Entonces la pregunta igual yo la haría al revés. ¿Qué
pasa si seguimos así? Qué pasa en un lugar en el que nos han robado el
suelo, nos han dejado en la calle, las fábricas las estamos llevando a
lugares donde hay una explotación laboral tremenda. Donde tenemos unos
niveles de paro juvenil sin precedentes que están llevando a una
generación a perderse más en la nada, porque no sabe nadie qué va a
pasar con todo esto. A unas reformas laborales salvajes. A poner a
disposición de las multinacionales y empresas los servicios más básicos
como la sanidad o la educación.
Javi – Me ha quedado por preguntar algo sobre el tema refugiados. Leí en internet que habíais hecho alguna cosa.
Rufí – Una adhesión como movimiento a la hora de ofrecer los pisos de
la obra social a personas refugiadas. Se hizo en un momento en el que
parecía que la cuestión de los refugiados era tan inminente, que se iban
a diseminar por toda Europa. Nadie se imaginaba que los iban a dejar
prácticamente encarcelados en las fronteras de los Balcanes.
De todas formas nuestra asamblea es una casa de refugiados. Hay
muchas personas que encuentran allí su refugio y es un ambiente en el
que las cuestiones de discriminación por razón de rito, de raza, de sexo
se trabajan, se superan, se reconocen. Hay una imbricación social muy
potente con gente muy diversa.
Esther – ¿estáis en alguna campaña ahora, o tenéis prevista alguna?
Rufí – El acto más importante que hoy se va a revisar en la Asamblea
es la acción de presión sobre la agencia estatal de vivienda. Esa es una
de las cosas que tenemos encima de la mesa, es decir, conseguir que las
reivindicaciones del bloque dos (uno de los bloques ocupados) se asuman
por parte de la administración. Que se revisen los contratos y que se
reparen todos los desperfectos de las viviendas y luego de forma más o
menos inminente, tenemos el día 5 de abril una nueva reunión con el
ayuntamiento para hablar del tema del plan de vivienda.
Mari – Y a nivel catalán hay una campaña que se ha iniciado hace unas
semanas para exigir alquileres sociales en los pisos liberados del
Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA). Y a nivel nacional se está
promoviendo una iniciativa legislativa popular (ILP), como la que se
aprobó aquí en Catalunya, para que la apruebe el gobierno central,
exigiendo cumplir con el derecho a la vivienda, el derecho a
suministros, no a los desahucios…
Ricki – Siguiendo el hilo de Mari, BBVA es el banco que más pisos
tienen cerrados en Manresa y es sido el que más crédito ha concedido al
ayuntamiento de Manresa. “No muerdas la mano que te da de comer”.
Rufí – Si, es el principal acreedor del ayuntamiento. El ayuntamiento
de Manresa tiene este año un presupuesto de unos 70 millones de euros,
pero la deuda sube 82 millones, y el principal acreedor del ayuntamiento
de Manresa es el BBVA con 35 millones de esa deuda. Es decir, los
ciudadanos de Manresa que pagamos impuestos este año, de nuestros
impuestos, al BBVA le pagaremos 770.000 euros solamente de intereses.
¡Solamente de intereses! Mientras ellos mantienen 117 pisos vacíos que
están esperando venderlos para seguir especulando. Y por tanto ¿cómo
podemos esperar que el ayuntamiento de Manresa haga la presión
suficiente para conseguir que el banco ceda esos pisos para vivienda
social? Tenemos que pelear mucho.
Ricky – Sin embargo BBVA te dirá que no ha estado rescatado nunca.
Efectivamente es así. BBVA lo que ha hecho es comprar a precio de saldo
bancas como Catalunya Caixa. La compró por unos 800 o 1.000 millones de
euros. Una banca en la que habíamos invertido todos y cada uno de
nosotros 2.000 millones de euros. ¡El rescate más grande que ha hecho el
estado español! Más grande que Bankia, si se tiene en cuenta la cartera
de clientes que tienen uno y el otro. Hay que tener en cuenta además,
que en el consejo de administración de Catalunya Caixa había unos
cuantos ex alcaldes, entre otros, el de esta ciudad. Paradigmático todo.
Ricki – De hecho, llega un momento en el que las cifras se te escapa
tanto de las manos Estamos tan sobrados de legitimidad en este sentido.
Está tan claro que se ha destapado la máscara que tenía esta gente y lo
que han hecho con el país que nos podemos perder en cifras y en números
que al final se queda en eso, en cifras y en números. Pero nos podemos
quedar con todo eso que ha quedado detrás, toda esa miseria, para que
esto no siga así.
Pilar – ¿Han comprado pisos en Cataluña los fondos buitres internacionales?
Mari- Si, Blackstone se quedó con todos los activos tóxicos de
Catalunya Caixa y en España tiene una inmobiliaria que comercializa
estas viviendas, se llama Anticipa.
Pilar – ¿Qué mensaje podéis dar a la ciudadanía para que colabore con la PAHC?
Mari – Es un tanto complicada esa pregunta. Porque la PAHC es
anticapitalista y es solidaria. Yo creo que al solidario ya le llegamos.
Ricki – Claro, yo te puedo contestar a mi manera. Cuando decimos
plataforma de afectados por la hipoteca y por el capitalismo, tengo el
interés puesto en trascender un poco a si soy afectado o no soy
afectado, a si tengo o no tengo una hipoteca. Afectados somos todos,
porque aquí se ha hecho el rescate más grande de la historia de nuestro
país y eso ha afectado en recortes en la salud, en la educación, en los
sueldos de los funcionarios, en muchas cosas. Y eso nos ha afectado a
todos.
Entonces yo le diría a la gente que cuando vea a unas camisetas
verdes (identifican a los militantes de la PAH) plantarse delante de un
banco, o en un ayuntamiento reclamando cualquier cosa, piensen que esta
gente está luchando para que no vuelva a pasar eso y para que eso se
corrija. Y de alguna manera, también, obviamente, tienen las puertas
abiertas a venir a ver qué es la PAHC y cada domingo a las cinco de la
tarde estamos aquí en el Ateneo y no somos excluyentes para nadie, de
ninguna manera, pueden venir a echarnos una mano, que de manos, por
desgracia, no nos sobran.
Javi – Es una experiencia humana también. A lo mejor no tienen problema de hipoteca pero no tienen buenas experiencias humanas.
Ricki – Siempre he dicho que el objetivo para mí de la PAHC y creo
que a nivel colectivo también, es desaparecer. Como decían los
zapatistas en su momento, el objetivo que se proponía el subcomandante
Marcos en su momento era desaparecer. Si hemos desaparecido es que hemos
ganado, ¿no?
Entrevista realizada a: Rufí Cerdán, Ricard Vidosa y Mari Sánchez.
Miembros de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca y el Capitalismo
del Bages. Cataluña.